Todas las muertes traen consigo dolor, pero hay algunas que provocan desconcierto. La madrugada de ayer, un ciudadano trabajador que se ganaba la vida transportando ladrillos en el día y como chofer de servicio público de autos en la noche, fue asesinado cruelmente por sujetos que habrían intentado robar el auto que alquilaba para ese fin. El hecho ocurrió en la carretera Panamericana en el límite entre Huáscar y San Martín de Porres.

Según las investigaciones, Jorge Flores Suárez (38), era chofer nocturno y trabajaba conduciendo un vehículo de servicio Pacasmayo - Chepén. Al parecer la noche del martes se presentaba sin novedad. En Chepén, a las 1.40 de la madrugada de ayer, habría abastecido combustible a la station wagon que alquilaba a Dulber Lozano Zelada. Se presume que desde Chepén habría partido a Pacasmayo realizando servicio. El viaje final que realizó antes de su trágica muerte, fue de Pacasmayo a Chepén a las 4.20 de la mañana aproximadamente. Los delincuentes fueron sus pasajeros. A la altura de la curva de bajada a Jagüey, habrían mostrado sus armas y conminado a Flores Suárez a detenerse para concretar el robo del vehículo que conducía.

En esos momentos de tensión, el conductor al llegar al Km. 690 de la Panamericana, zona del desenlace, habría jalado violentamente el freno de mano con lo que hizo patinar la camioneta y salirse levemente de la pista quedando en la berma en forma transversal. La brusca maniobra habría sido ejecutada para amedrentar a los delincuentes e intentar enfrentarlos. El plan de Flores no habría resultado y los delincuentes le habrían disparado sin ninguna contemplación.

En un principio resultó extraño que luego de producido el crimen, los delincuentes no se hayan llevado ninguna pertenencia de Flores ni el vehículo. La razón sería que, una unidad de Policía de Carreteras que había pasado minutos antes del incidente con dirección a San José, habrían retornado a los pocos minutos. Apenas asestado el disparo a Flores, los malhechores habrían divisado la camioneta de Polcar a la distancia que se dirigía hacia ellos. Los delincuentes no habrían tenido tiempo para hacer nada más y luego de saltar del vehículo habrían huido con dirección sur a la zona de Cerro Azul, que conecta con Mazanca y Chocofán o al norte hacia las chacras de Lache Chico.

Los efectivos de Polcar al ver el vehículo estacionado de una manera peligrosa al borde de la carretera habrían decidido acercarse. Allí encuentran a Jorge Flores Suárez sentado en su asiento de piloto, con la cabeza inclinada hacia su lado derecho, con una herida de bala en el cuello, debajo de la oreja derecha y con salida en la parte superior de la cabeza.

El cuerpo del infortunado hombre fue levantado con presencia del fiscal Roberto Villacorta que llegó a las 6.40 de la mañana. Fue trasladado en la camioneta de la comisaría de San José a la morgue del hospital del Minsa de Chepén. El vehículo, una station wagon color blanco de placa A4S-215, fue conducido a la comisaría de San José para las pericias. El occiso vestía pantalón de tela color beige. Un polo blanco sin cuello, encima un polo rojo y una polera color gris claro. Se le hallaron S/. 37.50. En el espaldar de su asiento había una manta con la que posiblemente se abrigaba en las madrugadas mientras esperaba pasajeros.