Todo, en el sexo, requiere un entrenamiento. Tu lengua es otra parte de tu cuerpo que debes “mantener en forma” para saber hacer que tu pareja tenga unos orgasmos impresionantes. No existe ningún curso específico para hacer que tu lengua se diplome con matrícula de honor en esta materia, así que, a continuación tienes unos cuantos consejos que te pueden servir de ayuda.

Calentamiento

Cuanta más energía y tiempo inviertas en la preparación de tu pareja, los resultados serán mucho mejores. Un baño de burbujas, puede servir para calentar el ambiente.

Fuera la ropa interior

De forma rápida o lenta, llegará un momento en el que os quitéis la ropa interior. Cuando esto suceda, no “bajes” directamente ya que puede que tu pareja se sienta un poco incómoda sin algún beso o caricia previa.

La ciencia del clítoris

No te vamos a decir dónde se encuentra, ya que tú ya deberías saberlo. Bo existe un enfoque universal de todos los clítoris del mundo, así que no puedes tratarles a todos de la misma manera. Lo principal es no “atacarle” y estudiar donde le gusta más que le chupen o que dureza de lengua prefiere. Comienza con leves movimientos de la lengua a lo largo de los labios y alrededor del clítoris, poco a poco ve estrechando el radio de acción hasta que te encuentres en la recta final. Cuando la lengua se concentre en el clítoris, con una mano acaricia sus pechos. Con la otra, puedes acompañar a tu lengua e ir tocando su sexo hasta introducir los dedos en su vagina.

El poder del silencio

La mejor manera de averiguar si tu lengua “está en forma” es hacer que la chica hable de lo que siente. Pero si te fijas, aunque no hables con ella sus movimientos te indicarán el buen camino. El silencio se romperá con sus gemidos de placer