Viajar con juguetes sexuales puede ser difícil. Si deseas evitar pasar la vergüenza de que el resto de las personas que te rodean, sepan lo que llevas en el interior de tu equipaje, lo mejor es que leas este artículo que te puede ser de gran ayuda. Viajes por tierra, mar y aire recuerda que debes comprar un juguete de unas medidas “apropiadas”. Existen muchos juguetes en el mercado que tienen un tamaño muy pequeño y que pueden llevarse de un sitio a otro en el bolsillo lateral de una maleta e o incluso su bolso.

Recuerda que estos pequeños juguetes son más fáciles de manejar que los grandes consoladores o vibradores que pueden ser vistos muy fácilmente en el interior de tu maleta. La discreción es otro punto muy importante a tener en cuenta a la hora de comprar un juguete “turístico”. Un patito de goma, siempre será mucho más discreto que un pene de impresión con todas las venas bien marcadas.

Tampoco debes olvidar que puede ser posible necesitar otros “accesorios” para utilizar tu juguete. El lubricante puede ser otro gran protagonista durante tu s vacaciones. Con el tema de este productos, ten cuidado en dónde lo guardas ya que debe ajustarse a las directrices de seguridad de los aeropuertos, al igual que otros líquidos como el champú, la crema solar, etc.

Mantén todo tu equipaje sexual en el interior de una de una bolsa limpia y seca. De esta forma te asegurarás de que tus juguetes no se mojarán con otros productos como por ejemplo la gomina o la colonia. Recuerda sacar las pilas de tus juguetes y llevarlas en otro apartado diferente. Así también te evitarás vibraciones inoportunas en momentos insospechados